El ojo seco se describe como una enfermedad de origen multifactorial, caracterizada por inestabilidad de la lágrima, aumento de la osmolaridad de ésta, anormalidades neurosensoriales, inflamación y daño de la superficie ocular.
Es una de las enfermedades oculares más comunes en el mundo. Se estima que 1 de cada 5 personas la padecen.
Existen 2 tipos de ojo seco. El ojo seco hiposecretor, debido a una baja producción de lágrima, y el ojo seco evaporativo, debido a una lágrima de mala calidad que se evapora rápidamente. Este último es el más común y en casi un 90% se debe a una disfunción de las glándulas de meibomio (Glándulas ubicadas en el borde de los párpados encargadas de producir una grasa que le da estabilidad a la lágrima).
Síntomas del ojo seco
- Ojo rojo.
- Ardor y piquiña ocular.
- Sensación de resequedad y de cuerpo extraño en los ojos.
- Visión borrosa fluctuante.
- Lagrimeo (síntoma paradójico).
- Sensibilidad a la luz.
Factores de riesgo de padecer ojo seco
- Sexo femenino.
- Edad avanzada.
- Trabajo prolongado frente a pantallas.
- Exposición a ambientes contaminados o con aire acondicionado.
- Uso de lentes de contacto.
- Antecedente de cirugías oculares.
- Alergias o infecciones oculares.
- Desórdenes hormonales.
- Algunos medicamentos orales o de aplicación oftalmológica.
Tratamiento del ojo seco
Es importante tratar el ojo seco, debido a que esto mejora la calidad de vida de los pacientes, el desempeño laboral y personal, mejora la tolerancia al uso de los lentes de contacto y los resultados visuales luego de cirugías oculares como de catarata o cirugías refractivas.
El tratamiento para el ojo seco y disfunción de glándulas de meibomio es amplio. Incluye la aplicación de colirios lubricantes, antiinflamatorios, inmunomoduladores y ungüentos; limpieza de pestañas, aplicación de calor y masaje en borde palpebral; uso de lentes protectores, cambios en el estilo de vida, entre otros. Todas estas medidas son soluciones temporales, que deben continuar en el tiempo para lograr mejoría de los signos y síntomas de la enfermedad.
IPL para tratar el ojo seco
La terapia de luz pulsada intensa (IPL) es una forma moderna y eficiente, con un amplio soporte científico para proveer una solución a largo plazo del ojo seco.
Su mecanismo de acción es:
- Mejora la circulación sanguínea de la zona tratada y reduce la inflamación.
- Elimina las venas anómalas que rodean las glándulas de Meibomio y alrededor de los párpados.
- Mejora la calidad de la grasa que secretan las glándulas de meibomio, así genera una película lacrimal idónea, que protege la superficie ocular.
- Tiene un efecto antimicrobiano y antiparasitario, y esto resulta muy positivo para mejorar la flora bacteriana de la conjuntiva y párpados, ayudando en el manejo de patologías como orzuelos, chalazión y blefaritis.
El E-eye es el único equipo de IPL diseñado específicamente para tratar el ojo seco y la disfunción de glándulas de meibomio. Genera pulsos de luz policromática, perfectamente calibrados y homogéneos que inciden en los nervios conectados a las glándulas de meibomio, con el objetivo de mejorar su función. Es un tratamiento no invasivo, indoloro y seguro para los ojos.
Cada sesión de terapia con IPL tiene una duración de 15 a 20 minutos.
Con el paciente recostado en una silla, se realiza:
- Limpieza de las pestañas.
- Aplicación de calor por 5 minutos.
- Compresión de las glándulas de meibomio.
- Se cubren los ojos del paciente con lentes protectores.
- Aplicación de gel conductor en zona de las mejillas.
- Se aplican 3 o 4 flashes de IPL debajo de cada ojo (zona del párpado inferior).
- Se limpia el gel.
El protocolo consiste en 3 sesiones (día 0, día 15 y día 45), con una cuarta sesión al día 75 como opcional. Posteriormente, se realizan tratamientos de mantenimiento a los 6 o 12 meses.
La mejoría en los signos y síntomas de ojo seco y disfunción de glándulas de meibomio se ven a los pocos días de iniciado el tratamiento con IPL.
Si presentas síntomas de ojo seco te invito a consultar conmigo el tratamiento con luz pulsada intensa. Agenda tu cita aquí.